El centro de la capital de Chile fue escenarios de violentas manifestaciones este domingo 18 cuando, al menos, dos iglesias del centro de Santiago fueron quemadas ayer tras la manifestación que congregó a decenas de miles de personas para conmemorar el primer aniversario de ola de protestas, las más graves desde el fin de la dictadura militar (1973-1990).

El primer templo atacado fue la iglesia San Francisco de Borja, usada regularmente por el cuerpo policial de Carabineros para ceremonias institucionales, y horas más tarde fue la iglesia de la Asunción, una de las más antiguas de la capital, con más de un siglo y medio de antigüedad.

Ambos templos se hallan en los alrededores de plaza Italia, el epicentro del llamado “estallido social” y que este domingo fue el escenario de una de las concentraciones más masivas en el transcurso de año.

La iglesia de San Francisco de Borja fue también saqueada y algunas de sus imágenes religiosas fueron quemadas en la calle, mientras que la de La Asunción vio como su cúpula ardía.