El canciller mexicano Marcelo Ebrard dio la bienvenida a las delegaciones del gobierno y la oposición de Venezuela, en el auditorio Jaime Torres Bodet del Museo Nacional de Antropología, para inaugurar el proceso de negociación y diálogo.
México como anfitrión y Noruega como facilitador fueron testigos de la firma del memorando de entendimiento, en busca de una solución pacífica y política entre los representantes de ambas partes en medio de un ambiente tenso por la profunda crisis política, económica y humanitaria que acorrala a Venezuela.
Dag Nylander, jefe del Equipo Facilitador del Reino de Noruega, enumeró los siete puntos de la agenda que estará a discusión: Derechos políticos para todos, Garantías electorales para todos, Cronograma electoral para elecciones observables y verificables, Levantamiento de sanciones, Restauración de derechos activos, así como Respeto al Estado constitucional de derecho.
El jefe de la delegación opositora, Gerardo Blyde, dijo que llegan dispuestos a lograr un acuerdo integral y un pacto de convivencia de largo alcance que beneficie a todos.
En tanto, el jefe de la delegación oficialista, Jorge Rodríguez, aseguró que están listos para que aparezcan acuerdos tempranos.
Las delegaciones se volverán a ver el 30 de agosto para discutir una agenda que no prevé la salida del poder de Maduro.
Estabilizar la economía
El memorando de entendimiento firmado este viernes en Ciudad de México urge por la “estabilización de la economía”, que se ha reducido 80% desde 2014, forzando la migración de más de cinco millones de personas.
Este nuevo intento de negociaciones se produce tras los fallidos diálogos de Barbados, en 2019, y República Dominicana, en 2018.
Ambas partes se mostraron “comprometidas con la estabilización y la defensa de la economía nacional, productiva, diversificada y solidaria”.
Y, de acuerdo con el comunicado oficial, respecto de la pandemia de covid-19, que en ese país ha dejado 316,449 contagios y 3,764 muertes, destacaron “las iniciativas humanitarias tomadas, particularmente la Mesa Nacional de Vacunación y el Programa Mundial de Alimentos”.
Voceros oficiales del gobierno de Rusia y España han manifestado su complacencia por el inicio de estas conversaciones. El gobierno de Estados Unidos ratificó el reconocimiento a Guaidó como presidente interino de Venezuela y subrayó que es necesario un progreso significativo para evaluar el levantamiento de las sanciones, afirmó el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Ned Price.
Price subrayó que la administración de Biden exigirá al régimen de Maduro “sinceridad en el proceso de búsqueda de una solución a la crisis de Venezuela si desea alivio de sanciones”.
“Solo con elecciones presidenciales libres y justas, el gobierno de Estados Unidos evaluará el levantamiento de sanciones contra funcionarios del régimen”, concluyó Price.
En representación de Guaidó y la plataforma unitaria participan el jefe de la delegación Gerardo Blyde, acompañado de los dirigentes políticos Carlos Vecchio por el partido Voluntad Popular, Tomás Guanipa por Primero Justicia, Luis Aquiles Moreno por Acción Democrática, Mariela Magallanes por los partidos minoritarios como la Causa R, Roberto Enríquez por Copei, Luis Emilio Rondón por UNT y Stalin González.
Por el lado del oficialismo, el presidente de la Asamblea Nacional chavista, Jorge Rodríguez y su hermana Delcy Rodríguez, vicepresidente del gobierno, el gobernador de Miranda Héctor Rodríguez y Nicolás Maduro Guerra, "Nicolasito". Al hijo del mandatario se lo vio el viernes por la mañana en Caracas, pese a que su padre había anunciado un día antes que iría a México.
Horas antes del encuentro convocado por el anfitrión de México, la delegación chavista trató de impedir la incorporación del embajador designado por Guaidó en Washington, Carlos Vecchio en representación de Voluntad Popular, partido fundado por Leopoldo López, a quien Maduro ha solicitado su extradición a España, lo que atizó la tensión de la reunión.