Durante una reunión celebrada este jueves en la Casa de Gobierno en Bogotá, el presidente Iván Duque confirmó que su gobierno ayudó a que el dirigente Leopoldo López saliera de Venezuela.
“Contribuimos a la recuperación de su libertad y de su voz”, sostuvo el mandatario colombiano, en referencia a lo ocurrido en octubre pasado, cuando López abandonó la residencia del embajador de España en Caracas, donde permanecía desde el 30 de abril de 2019.
El presidente Duque reiteró su condena al proceso electoral del pasado domingo en Venezuela, al que calificó como “un remedo de elecciones”, insistió en que “no hay otro camino en Venezuela que el fin de la dictadura”.
“Contribuimos a la recuperación de su libertad y su voz internacionalmente para denunciar las atrocidades del régimen, para mostrar que no hay otro camino en Venezuela que el fin de la dictadura y un gobierno de transición. Para la convocatoria de elecciones libres y la reconstrucción de tejido económico y social”, manifestó Duque.
El jefe de Estado colombiano enfatizó que su gobierno sí ha reconocido la Asamblea legítima y al presidente interino Juan Guaidó, señalando además que hoy se celebra el día de los derechos humanos, declaró que hace dos décadas Venezuela inició un proceso que desde la democracia se convirtió en una “dictocracia” y después en “la más brutal de las dictaduras”.
“Acabó el tejido empresarial, la independencia de poderes, la prensa libre y cualquier forma de iniciativa privada. Ha traído pauperización y una desolación social, que ha detonado en una crisis migratoria y humanitaria sin proporciones”, precisó Duque, quien le ofreció a López la ayuda de su gobierno para defender la democracia y denunciar “las atrocidades del régimen”.
Según Duque, se requiere de un gobierno de transición en Venezuela, en el que haya también participación del chavismo y otros sectores. Por ello, dijo, continuará con su presión diplomática para allanar el camino para un gobierno legítimo y activar un proceso de reconstrucción económica y social.